JUGOS ORGÁNICOS
UN FESTIVAL DE SABORES
EL INCREMENTO EN EL CONSUMO DE JUGOS ORGÁNICOS ES UNA TENDENCIA EN ALZA QUE ABRE EL CAMINO A NUEVOS HÁBITOS SALUDABLES.
El auge de los productos orgánicos (libres de pesticidas y herbicidas) allanó el camino para la elaboración de bebidas a base de frutas y verduras con esas características.
La particularidad que hace a un producto orgánico es que se cultiva y cosecha de forma natural, casi se diría artesanal como se hacía hace siglos atrás cuando no existía la industria de químicos ni la tecnología actual.
Los especialistas coinciden que son alimentos (los orgánicos) que no contienen químicos peligrosos y por eso se consideran más saludables.
Por tal motivo, los jugos orgánicos se comenzaron a expandir más en el verano cuando el consumo de líquidos es mayor, además los jugos orgánicos no contienen conservantes, ni azúcar agregada, ni químicos artificiales (organismos genéticamente modificados, antibióticos) que causan diversos problemas de salud, tales como, enfermedades coronarias, osteoporosis y migrañas.

DIFERENCIAS
Los jugos orgánicos y los détox son bebidas diferentes cada uno ofrece beneficios particulares y son recomendados en situaciones distintas.
Una de las primeras diferencias es que los jugos détox se elaboran con frutas y verduras cuya composición natural ayudan a la eliminación de toxinas que se suelen acumular en el organismo,
sobre todo, cuando se descuida el
plan alimentario.
Los jugos desintoxicantes (détox) se recomiendan como diuréticos, reducen la hinchazón y depuran el cuerpo de toxinas.
Dependiendo cuál sea el motivo será la composición del jugo y la combinación de frutas y verduras, lo recomendable es que lo planifique un nutricionista.
Como cualquier alimento, los excesos
tienen efectos negativos. A largo plazo los détox suelen provocar deficiencia nutricional, tal como, la falta de fibra, pérdida de la capacidad de comer alimentos reales, posible pérdida de
masa muscular, desconcentración
y desmotivación.
Otra versión difundida son los jugos verdes. Elaborados a base de vegetales y frutas verdes, tales como, la espirulina, chlorella, cilantro, aloe vera, cúrcuma, jengibre, entre otros.
Los especialistas coinciden que son bebidas con altas dosis de clorofila; la estructura molecular de ésta es similar a la hemoglobina (la proteína que le da el color la sangre).
El consumo diario de clorofila es una de las vías para evitar el envejecimiento celular provocado por la liberación de radicales libres, oxigena y rejuvenece de
forma natural el cuerpo.
ENVASADO
El envase es otro aspecto fundamental para que los brebajes naturales se conserven en condiciones para ser consumidos. En el mercado es habitual conseguir jugos orgánicos en recipientes de vidrio y/o en el formato tetra brik cuyo proceso de envasado y el material del recipiente permiten que el producto conserve sus propiedades naturales.
Vale agregar que, los alimentos orgánicos provienen de fuentes naturales supervisadas. De hecho, todo el proceso es controlado anualmente y certificado por normas que regulan la producción orgánica.

CONSUMIDORES CONSCIENTES
En la actualidad, el incremento de producciones orgánicas permitió que la comercialización aumentara también. Hoy es habitual conseguirlos en supermercados, locales de delicatessen, kioscos, dietéticas y/o estaciones de servicio.
Aunque los jugos en polvo comenzaron a izar la bandera de perfil orgánico, las medidas sanitarias vinculadas a la industria de los alimentos y bebidas aún no han clasificado como tal a ninguna marca en particular.
Los jugos orgánicos se elaboran con frutas y verduras naturales; esa particularidad a la larga repercute en el correcto funcionamiento del organismo, cuestión que muchos consumidores han experimentado. Dependiendo las combinaciones sus propiedades varían y los beneficios en el cuerpo también.
Texto: Andrea Soria