Pet

Embotella tu creatividad

Una botella de PET tarda mil años para desintegrarse. Como residuo son súper contaminantes del ambiente, pero, como materia prima son grandes aliadas para las buenas ideas.

En la actualidad las ideas para reciclar PET son de las más diversas. Se pueden fabricar desde objetos pequeños hasta una casa, sí, una casa o refugio. Un caso testigo se encuentra en un pueblo de Nigeria donde construyeron la primera casa del país con botellas de plástico PET recicladas; una atracción turística inédita. Se emplearon 7.800 botellas aproximadamente para su construcción; cuenta con un dormitorio, salón, cocina, y baño. Los muros sólidos resisten terremotos y ofrece un buen aislamiento térmico.

Cada año crecen los adeptos a reutilizar el PET en diversas aplicaciones, una de las más difundidas es el regador moderno, para ello se necesita una botella de plástico, una aguja gruesa para perforar, un adaptador hembra de manguera y, arandelas para obstruir las posibles fugas.

Otra idea puede ser crear un jardín único, en un balcón o en un patio sólo se necesitan algunas botellas, tanza o clavos y una estructura (puede ser un pallet) o una pared. Se recomienda usar botellas de plástico de dos litros, realizar cuatro pequeños orificios y cortar la botella en su parte superior.

También se puede generar un sistema de almacenamiento de elementos, para ello se necesitan bidones o botellas de al menos 40 litros. Siempre la primera tarea será lavarlos. Una vez que están secos y listos para reutilizar es preciso generar una estructura que los contenga, luego se cortará cada recipiente para que en una de sus caras quede abierto para guardar los elementos.

Más ideas

Las escobas fabricadas con PET son muy útiles para superficies ásperas o para barrer elementos que con las escobas convencionales no llegan a limpiar bien.

Se necesita alambre, martillo, tijeras, cutter y las botellas de PET. Primero se corta la base de la botella y deja la parte de la boca. La parte intermedia será útil para el hilado.

Una de las botellas deberá ser más grande para que quepan las más pequeñas encimadas unas con otras.

Para fabricar un tanque modular vertical que tenga la función de almacenar agua de lluvia, se necesita botellas de PET de tres litros o en su defecto los bidones. Estos van interconectados entre sí, para conformar un depósito de agua tipo vertical, compacto y resistente a las presiones del líquido. Es necesario colocar antes una estructura que los contenga bajo el tejado por donde caerá el agua.

Mil años para desintegrarse

El Polietileno de Teleftarato (PET) es un plástico que se emplea para fabricar botellas o envases de distintos productos.

Una vez que se convierte en residuo, el PET puede contaminar el ambiente a altos niveles o puede ser reutilizado, porque hasta degradarse por completo tarda unos mil años.

De acuerdo a las estadísticas elaboradas por diversas instituciones públicas y/o privadas, en Argentina se producen y descartan unas 200 mil toneladas anuales de envases PET; sólo el 20 por ciento de elementos que se pueden reciclar se recuperan, por falta de políticas públicas adecuadas que regulen la actividad del reciclado.

Recuperar

A partir de una botella de PET, se puede fabricar fibras textiles para la confección de mantas, indumentaria, bolsos, alfombras, calzado, cuerdas, cepillos, escobas o nuevas botellas.

De hecho, más de la mitad de los envases que se recuperan en Argentina se muelen y exporta como fibra textil.

Para fabricar una tonelada de PET convencional se consumen 3,8 barriles de petróleo, si el material es reciclado sólo se usan botellas que están en el suelo, ríos, cunetas y basurales. El reciclado requiere un 70 por ciento menos de energía y emite casi un 60 por ciento menos de gases de invernadero, principales enemigos del ambiente y promotores del cambio climático. Por otra parte, el reciclado reduce el volumen y los costos de disponer residuos en rellenos y basurales, y crea miles de empleos destinados a la recolección y el acopio.

Texto: Andrea Soria