AUTOFOBIA

EL MIEDO A LA SOLEDAD, UNA PANDEMIA INSTALADA

El incremento de personas ansiosas se expandió a nivel mundial,la principal causa es el temor a estar (o quedarse) solo.

 En los últimos años la ansiedad aumentó en todo el mundo. En Argentina, casi la mitad de la población la padeció a lo largo de la crisis sanitaria que decantó en cuadros depresivos.

Los datos surgen de un sondeo realizado hace dos años en todo el país por el lnstituto de Investigaciones Psicológicas (IIPsi), dependiente del Consejo Nacional de Investigaciones Científicas y Técnicas (Conicet), y la Universidad Nacional de Córdoba.

El estudio reportó además que jóvenes, mujeres y personas con antecedentes de trastornos mentales sufrieron más el impacto del aislamiento.

En un comunicado que emitió hace unos meses la Asociación Americana de Psicología (APA, por sus siglas en inglés) advirtió sobre un leve pero significativo incremento de la soledad, lo cual podría tener implicancias para la salud mental y física, la longevidad y el bienestar a largo plazo.

De hecho, es una problemática con alto riesgo de mortalidad prematura.

CONSIDERACIONES GENERALES

La soledad es definida por la APA como “el sentimiento doloroso de tener menos conexiones sociales o de peor calidad de las que una persona desea” y aclara que diflere del aislamiento social que se aplicó en las primeras etapas de la pandemia, que puede ser conceptualizado como “una red social pequeña y pocas interacciones con los demás”.

El miedo a la soledad es algo frecuente en el ser humano. Sin embargo, es necesario distinguirlo de una fobia.

En el vasto espectro de los trastornos de ansiedad, la “autofobia”, es la manifestación extrema del miedo a la soledad.

CASOS EXTREMOS

El contacto social con el entorno (amigos, pareja, familia, compañeros) puede llegar a deteriorarse debido a que el afectado evitará en todo momento quedarse solo, generando una dependencia física y emocional de los demás.

En estas circunstancias, el sujeto tendrá comportamientos extraños y manipulará con enfermedades u otros problemas imaginarios con el fin de evitar la soledad.

Se han elaborado varias hipótesis de las causas por las que puede generarse la fobia a estar solo, entre ellas, patrones de crianza, las experiencias traumáticas y la genética, entre otros.

El sujeto necesitará explorar, con ayuda de un psicoterapeuta, qué es lo que le provoca el miedo excesivo a la soledad y por qué necesita la compañía constante de un otro. En ese proceso será de gran utilidad una terapia enfocada en la gestión del manejo del estrés, el desarrollo de las habilidades sociales y resolución de problemas.

En definitiva, es importante buscar la salud mental si se experimenta síntomas de autofobia, para obtener el apoyo necesario y realizar el tratamiento adecuado.

Texto: María del Pilar Viqueira