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LITORAL MARINO COSTERO
La Ruta Azul es un circuito ideal para descubrir el litoral marino costero; integra rincones de varias provincias de la Patagonia Argentina. Recomendaciones para visitar los principales.
La Ruta Nacional N° 3 es conocida como la Ruta Azul, en su trayectoria abarca una extensa superficie de la costa patagónica. El circuito comienza en Bahía Bustamante en la provincia de Chubut, donde pasa por el Parque Marino Costero Patagonia Austral y las ciudades de Camarones y Comodoro Rivadavia. En la etapa que atraviesa la provincia de Santa Cruz abarca diversas ciudades y poblados, tales como, Caleta Olivia, Puerto Deseado, los Bosques Petrificados de Jaramillo, Puerto San Julián, Piedra Buena, Puerto Santa Cruz hasta llegar al Parque Nacional Monte León. Más o menos son alrededor de 800 kilómetros por eso siempre es recomendable planificar el recorrido en función del tiempo y dinero para disfrutar al máximo.
Un plan sugerido
Puerto Deseado es una de las principales e inevitables paradas (partiendo desde Comodoro Rivadavia), alberga reservas y áreas protegidas inigualables donde conviven la fauna y la flora autóctona logrando una amplia biodiversidad. Una de las reservas más visitadas es la Bahía Laura se encuentra al sur de Puerto Deseado, entre el faro Campana en Punta Mercedes y el faro Cabo Guardián. En esta reserva habitan colonias de cormoranes de cuello negro, gaviotas cocineras, patos de vapor, patos crestones y bandadas de chorlitos de rabadillas blancas. En algunas épocas es posible el avistaje de toninas overas. Más cerca del Cabo Guardián conviven los pingüinos de Magallanes, cormoranes imperiales, ostreros negros, gaviotas, entre otras especies. Desde Comodoro Rivadavia hasta el primer destino son alrededor de 300 kilómetros. En esta parada uno de los sitios más recomendables es el Parque Interjurisdiccional Isla Pingüino, una perlita de la aventura considerando que se trata de la única colonia continental de pingüino de penacho amarillo que comparte el territorio con los pingüinos de Magallanes y lobos marinos que habitan en las inmediaciones del Faro centenario de la isla que, aún en ruinas, permite vislumbrar su pasado esplendoroso. Hay embarcaciones que proponen travesías para el avistaje de delfines y toninas overas.
Naturaleza pura
La Ría Deseado es un formidable accidente geográfico que se produce por la inmersión del océano dentro del continente a lo largo de 42 kilómetros en el antiguo cauce del rio Deseado. Esto genera que en ese tramo habite especies animales inéditas que se pueden apreciar en las excursiones náuticas. Innumerables atractivos conforman un banquete de lujo para los amantes de la naturaleza en estado puro. En los avistajes se pueden observar loberías y colonias de cormoranes que conviven en medio de ruinas de embarcaciones que revelan viejas historias de marineros y capitanes.El legado de Darwin
Antes de abandonar Puerto Deseado una parada indiscutida es Campamento de Darwin y la Estancia “El Paso”. Se trata de un impresionante escenario de grandes formaciones rocosas que se encuentra sobre el final de la Ría y donde el naturalista Charles Darwin acampó en 1833 cuando realizó una expedición por la Patagonia. Asimismo, cerca del campamento está el Parque Nacional Bosques Petrificados, abarca una superficie de más de 63 mil hectáreas conformado por troncos caídos y petrificados, la mayoría con una antigüedad de 150 millones de años. Diversas expediciones científicas dan cuenta que antes de su condición actual, esos troncos eran hermosos bosques con árboles gigantes, entre ellos las especies de la familia de los pehuenes (araucaria), que quedaron sepultados de lava y ceniza por las erupciones volcánicas del período Cretácico y el levantamiento de la cordillera.
Huellas históricas
La localidad de Jaramillo y Fitz Roy se formaron a la vera del trazado ferroviario, en la actualidad están identificadas por la construcción de edificios tradicionales de chapa, madera y pintorescas casas de piedra construidas por picapedreros a principios de los años1900. Además, estas localidades fueron centro de las huelgas del año 1921.
En la actualidad se conservan algunas estaciones ferroviarias devenidas en museos de sitio luego de ser restauradas como una suerte de rescatar la memoria e identidad de esos territorios.
El circuito de una semana sugerido puede concluir en Río Gallegos, capital de la provincia de Santa Cruz.
Texto: AS
