La calistenia es un conjunto de ejercicios para entrenar el cuerpo, sólo usa el peso de la persona, por eso se puede practicar en casa, en un parque o en un gimnasio sin necesidad de máquinas o cargas adicionales.
Uno de los entrenamientos más difundidos en la actualidad es el más antiguo del mundo. La calistenia surgió en las primeras civilizaciones, en Grecia, en el ámbito militar para que los soldados se mantuvieran en estado físico adecuado.
En concreto, la calistenia consiste en un conjunto de ejercicios que emplea el propio peso del cuerpo al ejecutarlos para conseguir fortalecer los músculos, mejorar la flexibilidad y resistencia. También beneficia la concentración y el bienestar integral.
La ejecución de la rutina de ejercicios se puede programar en el mismo domicilio, en un gimnasio (solo o en grupo), en un parque o donde la persona desee.
Esta versatilidad y accesibilidad permite que no haya excusas para no ejercitar, inclusive se diseña de acuerdo a cada usuario adaptado a todos los niveles.
Una rutina completa implica trabajar la fuerza muscular, la capacidad cardiovascular y la flexibilidad de manera equilibrada.
De esta forma se fortalece y tonifica cada grupo muscular y se estimula al mismo tiempo la fuerza y la flexibilidad, combatiendo la atrofia y el sedentarismo.
A nivel social, la calistenia promueve el apoyo y la motivación grupal, ya que, la mayoría de las personas deciden practicar en parques y espacios públicos donde se reúnen para entrenar juntas.
Con el entrenamiento diario el cuerpo logra ganar resistencia, agilidad, equilibrio, coordinación y flexibilidad.
Desde hace un tiempo, la calistenia cobró protagonismo gracias a estos atributos (de flexibilidad, adaptabilidad a cada usuario y bajo costo) y, a la vez, se posiciona como disciplina deportiva.
Con el entramiento diario se trabaja brazos, espalada, el tronco y las piernas, porque incluye sentadillas y zancadas. Además de estos, existen otros ejercicios calisténicos como los saltos, escaladores y pistol squats que también contribuyen a un entrenamiento integral de las piernas, permitiendo un desarrollo equilibrado de la fuerza en todo el cuerpo.
Los ejercicios realizados en calistenia se dividen en básicos que son los convencionales para el fortalecimiento de los músculos; los ejercicios estáticos que requieren mayor experiencia y horas de entrenamiento con ejercicios avanzados, tales como, mantener una posición por algún periodo de tiempo, estos requieren mucha fuerza muscular y en tendones, mayormente en tendones por lo que son más difíciles de conseguir).
Un tercer grupo de ejercicios llamados dinámicos son también avanzados y consisten en el movimiento y balanceo del cuerpo, se utilizan en “freestyle” implican fuerza, agilidad y reflejos.
En una jornada de calistenia se inicia el entrenamiento con una entrada en calor, a continuación se ejecutan ejercicios con mucha repeticiones, un intenso trabajo en la zona de brazos, abdomen, piernas y glúteos.
El entrenamiento requiere de gran concentración, ya que, el trabajo se enfoca en los movimientos y la forma de ejecutarlos, con la postura correcta y conciencia plena en la forma de ejecutar el ejercicio. De esta manera se corregirán vicios posturales e incorrectos previendo (y evitando) lesiones.
Los estiramientos al finalizar el entrenamiento son fundamentales para regresar al ritmo habitual y acompañar el organismo a relajarse.
Una buena rutina de calistenia combina técnicas propias de la danza, el yoga, las artes marciales, la gimnasia consciente y el stretching.